Aquello estaba al rojo vivo
No dude de mi palabra
Parecía como esas patatas del programa de Ramón Garcia
A punto de estallar
Rozaba el rocio las diez de la mañana
Una buena hora
Para descargar la rabia del sueño y la vigilia
Pero había un problema
La frialdad se hizo con la habitación
Y mis huevos lloraron como dos jarrones rotos
Se había confirmado la regla:
Ella había comenzado a sangrar…
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