La miro y digo:
Es bonita,
Es graciosa,
Es adorable.
Pero no encuentro palabras grandes
Formas bellas
Profundas para reflejarlo.
La miro y digo:
Por qué jamás fui capaz de escribir
Un poema de amor?
Por qué me sentía tan estúpido
Cuando decía:
Sus labios …
Sus cabellos …
Sus dulces ojos … ?
Y luego rompía el papel
Me maltrataba
Insultándome por ser tan necio
Gritándome al espejo:
“Pero quién coño te crees?
Gustavo Adolfo Becker?
Él, el bueno de Gustavo
No lo habría hecho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario