-Rubén Casado Murcia-
Va por la página 96
y ya dice que no le gusta.
“Pero es que no pasa nada.”
Argumenta.
“Debes tener paciencia."
Le digo.
Va por la 123 y dice
que Dostoievski es una “mierda.”
Mientras, cojo aire
y lo expulso lentamente.
Reitero:
“Debes tener paciencia.
Él no es como los demás.”
A la altura de la 152
atisbo sus labios despegarse.
Cierro el puño.
Tiene algo que decirme
y no estoy preparado.
“¡Oye, creo que me está empezando
a gustar!”
“Lo ves, hay que tener paciencia,
siempre hay que tenerla."
De seguido, mi mano se desflora
y el odio
rueda por el suelo.
sublime!!!
ResponderEliminarSerendípity
como siempre los mejores finales salen de tu pluma,y ya sabes lo que dicen,quien bien acaba que mas da como empiece...lo leí de nuevo y me gustó más que antes.que coño,muy bueno
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