Cacagénesis:


William Saroyan:
"Es sencillamente imposible insultar al género humano sin sonreír al mismo tiempo".







domingo, 14 de marzo de 2010

EL OBJETO ESCULTÓRICO EN SU TIEMPO DE RELOJ. EL HOMBRE Y SU DETENCIÓN. ( II )




2º PARTE

-Antonio Cano Martínez-

Reivindicamos todo mediante la forma, sobre una estructura, sobre un resorte y a veces sobre la misma antítesis, la pérgola de toda crítica, el ciclo repetititvo y pertinaz de cada objetivo. Somos la emancipación de todo tiempo pasado, el deleite de dos cuerpos, el placer, el forcejeo, las frases guarras, la locura mediática que se oculta dentro, fuera queda el peligro de todo viejo recuerdo, la detencíón, el retroceso...
Ya en la prehistoria se levantaron enormes superficies de piedra sobre una simbología
excéntrica y sin reparos en manifestar la supervivencia y evolución de un mundo virgen.
Ya, por entonces, los objetos representaban una intencionalidad más allá de su mera forma. Son muchos los que creen que la primera construcción escultórica nace con el menhir, "el eterno poder fálico", la sublevación de una raza frene al entorno inhabitado. Nace la determinación de los primeros espacios, nace la intencionalidad, la búsqueda de un objetivo.
Es sabido por todos que ha habido una evolución desde entonces, nos hemos creado problemas y los hemos resuelto, tergiversado respuestas, influenciado, hemos discrepado y gestado estilos donde reivindicar la importancia de nuestro tiempo, figuramos historias con cadáveres, reavivado las cenizas de cada fuego, de cada idea...la evolución ha creado el monstruo de la creatividad y ahora ya no hay límites.
El diálogo, la similitud, la palabra, todo envuelto en un lenguaje donde la acción de crear toma un significado propio.
El concepto es el tiempo y, éste, lleva consigo el olvido, el recuerdo, el presente, el pasado, todo un juego cíclico donde perdernos antes del próximo futuro, antes de la próxima actuación.
Existe una relación con la palabra, el sentimiento de lo que se ha tenido, ese diálogo constante y deliberado del objeto con lo que se está representando, la idea de recuperar lo perdido como el medio de lo efímero, de todo aquello que ya pasó y, que aún así, sigue estando presente.
Hay una evolución intermitente, una paradoja, un reflejo fugaz que recorre toda permanencia, ademanes pútridos de nuestros ancestros, áncoras donde oxigenar y resarcir. Hay un desgaste de intenciones opuestas, de benevolencia obligada, de hipocresía déspota. Hay una lluvia de aguzada promiscuidad donde encontrar ese lenguaje, esa palabra, la conversación del ciclón como fenómeno destructivo con su prójimo, la inmediatez destruida. Los vestigios de todo paso temporal.

"No ve ni a izquierda ni a derecha ni hacia el futuro; en el estrecho círculo de sus pensamientos, gira y gira corriendo sin cesar, o más bien se pasea." Franz Kafka.

Jalonamos nuestros proyectos con fotografías, fotografías que comienzan su envenjecimiento justo en el momento en que son tomadas y, con ello, no sólo sustraemos una imagen, más bien formulamos una memoria. Y esta memoria, cómplice de todo momento, se convierte en la cadena inseparable del ayer, un escollo de nuestra propia creación.
El significado de elaborar ese paso atrás es la consolidación de todo objeto escultórico dentro de un espacio concreto y sobre un tiempo en relación con el significado del mismo, es decir, el hecho de actuar requiere una intencionalidad y ésta pretende un resultado en los límites de un contenido más o menos acertado, formulándose así la gestación de un final.

5 comentarios:

  1. teniendo en cuenta que todos,exceptuando al pistos, es decir, antonio peña,sois una pandilla de cabrones, puesto que me tachais de tecnicista barato,cosa que no discuto,y soporifero en el arte del lenguaje, he decidido remitirme de aqui en adelante al mundo efimero...viva la riera.
    Veterano.

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  2. sabes que no es así, es cierto que el texto era denso de cojones, pero el contenido es bueno, solo que, por favor, se breve...
    más breve, incluso
    más breve.

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  3. El objeto escultórico se ha convertido en una sección cuya "intensidad" la hace inolvidable y cuando el tiempo de reloj va pasando el cuerpo pide una tercera parte... incluso creo que es momento de tirar de la compleja mística del espacio.

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  4. me uno a esta iniciativa, pido encarecidamente una tercera parte, me ha sabio a poco...

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  5. pues a mi me tiene hasta el ojete escultórico!

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